LAS FALSAS DERECHAS
Reproducimos ahora este
testimonio de una lucha tenaz que no ceja, no tanto para rendir homenaje a su
autor, el P. Sáenz y Arriaga, que de todos modos con creces lo tiene merecido,
ni tampoco como recuerdo de viejos combates y amigos, que eso solo ya sería una
justificación más que suficiente, sino para que nuestros lectores reflexionen y
se esmeren por mejor distinguir, aquí y ahora, tantos y tantos personajes y
grupos que son sinuosa y perfecta continuidad de los farsantes sindicados aquí,
de los falsos personajes y grupos políticos y falsos pastores que, fingiendo
defensa de nuestra Patria Americana y de la Fe, significan para ellas en
verdad, porque solapada, su fuerza erosiva más eficaz.